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lunes, 28 de noviembre de 2022

Egipto: Las oportunidades superan los riesgos

El Cairo, Egipto

 Las finanzas públicas saneadas, las obras públicas y la apuesta por las renovables ponen de manifiesto la modernización económica del país africano, sede de la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. 

Tras dos años de pandemia que han impactado en sectores clave de la economía y a pesar de las secuelas de la guerra de Ucrania, la economía de Egipto siguió creciendo y cuenta con el favor inquebrantable del FMI, la UE y los países del Golfo.

El país de los faraones es demasiado grande para fallar y demasiado lleno de historia antigua para caer en la irrelevancia. Y situado en la encrucijada del Mediterráneo, África y Oriente Medio, es tan atractivo como populoso. Con el talento potencial de 100 millones de personas aferradas al rio Nilo, Egipto es una nación de peso con un lugar prominente en la mente cultural, política y religiosa en toda la región.

Además, se está posicionando activamente como parte de la Ruta de la Seda, con vínculos comerciales que abarcan siglos y un gran interés en las rutas comerciales que pasan por el Canal de Suez. Este canal ha servido al mundo durante más de 160 años y es una importante fuente de ingresos, unos 5.000 millones de dólares anuales.

La marea está cambiando, con más turistas regresando, empresas privadas trabajando sobre una base más segura y un programa de reforma estructural en curso.

Egipto necesita adoptar políticas que fortalezcan al sector privado, especialmente las pymes, y promover el crecimiento del empleo con el fin de consolidar el esfuerzo de reactivación económica para seguir creciendo. Las mejoras en los indicadores financieros al mantener la tendencia a la baja del déficit presupuestario y la deuda como porcentaje del PIB son claves para impulsar el entorno empresarial.

El sector privado es el principal motor del crecimiento y de creación de empleos debido a su dinamismo y agregó casi un millón de empleos. También es preciso atraer inversiones y tener mejoras de las exportaciones, Se están adjudicando contratos de proyectos en los sectores de la construcción y el transporte con valores que han aumentado durante los últimos años.

Este mes de noviembre, Egipto ha sido anfitrión de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, COP27, lo que le ofrece la oportunidad de desempeñar un papel destacado en las conversaciones en curso y mostrar los hitos y desafíos de la transición energética del propio país.

El gobierno de Egipto está trabajando en una estrategia de hidrógeno con una inversión de 40.000 millones de euros, un proyecto que incluye la entrega de 1,400 MW de capacidad para 2030, lo que lo convertirá en un jugador potencial clave en los combustibles bajos en carbono. La impresionante transición de Egipto de un déficit de energía crónico a un superávit sustancial es un camino que pueden seguir otros países de la región.

Además de ser una de las economías más grandes de África, puede convertirse en la puerta de entrada al continente. En Egipto las oportunidades económicas disponibles superan los riesgos.

Expansión, Edición Catalunya, Opinión,  23 Noviembre 2022

https://www.expansion.com/catalunya/2022/11/23/637e53d0e5fdea1b0b8b4688.html

lunes, 24 de octubre de 2022

Barcelona, a por el talento

 

Desde el final de la Segunda Guerra Mundial, el comercio y los flujos de capital se han liberalizado más que en cualquier otro momento de la historia, mientras que la movilidad humana sigue estando muy restringida. Sin embargo, en una economía del conocimiento global, los países que no compitan por trabajadores altamente cualificados se quedarán atrás.  

Ahora es el momento de aprovechar los beneficios de la movilidad del talento para que contribuya a la diversidad en la economía y a generar oportunidades de empleo que requieren a su vez de movilidad nacional o mundial. Mientras que la mayor parte del mundo desarrollado está envejeciendo, muchos países en desarrollo tienen una proporción cada vez mayor de jóvenes.

El talento sin fronteras crea valor. En un mundo impulsado por los flujos de personas, capitales e ideas este talento es el gran revulsivo para la economía, la creación de nuevas empresas y la internacionalización. En EEUU, Canadá o Emiratos Árabes, donde conviven y trabajan diferentes nacionalidades, las empresas más exitosas son las que incorporan las influencias y valores de otras culturas, y permiten a un amplio espectro de personas participar activamente y aprovechar el potencial para sacar lo mejor de su diversidad.

Sumar capacidades, creatividades y culturas genera sinergias y riqueza. Y al hablar de inmigración a menudo se olvida que la diversidad es lo único que todos tenemos en común.

Las ciudades deben emprender un proceso integral y continuo que comienza con la atracción de talento potencial, se centra en la retención de los mejores y asegura su desarrollo profesional sostenido. Solo resistirán aquellas ciudades que apuestan por crear entornos competitivos diferenciados, por innovar, por generar actividades de valor mientras facilitan redes y servicios logísticos eficientes y mayores niveles de satisfacción.

Barcelona aparece ya como destino para el talento internacional, y será sede de la Red Europea para la Retención de talento internacional (ENGAGE) desde 2023. La ciudad dispone de infraestructuras, una gran oferta hotelera, distritos de innovación útiles para la promoción internacional, y puede desarrollar una oferta que sea a la vez cuantitativa y de calidad. Pero debe consolidar y rentabilizar su marca y reputación y facilitar la atracción, llegada y retención de talento, empresas, centros académicos e instituciones internacionales, para beneficiar a la ciudad y sus ciudadanos.

La capital catalana ocupa una posición estratégica, y su modelo puede ser una referencia para el intercambio, el dialogo y la integración. Pero hay que consolidar la apuesta como ciudad plataforma y centro decisivo en el Mediterráneo. Para ello, es preciso aunar voluntades, y recursos y remar en una sola dirección.

Barcelona ha conseguido una transformación espectacular y un dinamismo que le ha valido el reconocimiento y la admiración a nivel mundial. Pero la carrera no ha terminado. Vivimos en un mundo complejo y la realidad muestra un aumento de la competencia internacional. Ignorarla sería muy peligroso. No se puede actuar como si el éxito dependiese de la historia o como si el futuro estuviese predeterminado por el pasado.

 Anwar Zibaoui

La Vanguardia, Opinión, 2 Octubre 2022

martes, 31 de mayo de 2022

En logística, todo circula, todo debe circular

  Los conceptos logística y cadena de duministro han invadido nuestras vidas porque no se ciñen al ámbito económico. Son un asunto de todos que afecta directamente al precio y la disponibilidad local de alimentos, medicamentos...  

Las crisis desencadenadas por la pandemia, el Canal de Suez o la guerra de Ucrania evidencian que las empresas deben diseñar sus cadenas de suministro en torno a la competitividad del riesgo, en lugar de solo el costo, porque de ello depende su éxito empresarial, pero también la resiliencia de nuestra sociedad.

El sector logístico es una parte integral de cada negocio y una palanca para el crecimiento y la competitividad. Una logística efectiva desarrolla la economía. Una logística eficiente reduce costes en exportación, importación y distribución. El modelo de abastecimiento global que alguna vez prevaleció en las cadenas de valor ha evolucionado a medida que las nuevas tecnologías y los patrones de demanda de los consumidores cambian.

Hoy, la internacionalización requiere poner un especial énfasis en el rendimiento global de las redes de distribución y suministro, pero también en la regionalización de sectores que se benefician de la proximidad geográfica y la complementariedad económica.

Las cadenas de suministro globales se están poniendo a prueba en una disrupción económica sin precedentes. Los clientes demandan cada vez más y se vuelven más dependientes del éxito, la flexibilidad y la resistencia de su cadena de suministro.

Para afrontar el desafío es fundamental la tecnología de datos y la digitalización. Además, estas actividades generan empleo y contribuyen a la soberanía económica y al desarrollo regional, al fortalecer una industria exportadora, y al modernizar la distribución y el comercio. También es clave la sostenibilidad, es fundamental impulsar estrategias para controlar y mejorar las cadenas, para la descarbonización del transporte y la optimización de las redes de distribución.

Precisamos una visión estratégica global, desde lo local y regional hasta lo internacional. Un visión que forme parte de las políticas públicas e impulse la industria, la competitividad, la innovación digital y ambiental, el transporte, la ordenación del territorio y ecología, etc. Europa está evolucionando en esta dirección, y debe centrarse en la competencia leal y la competitividad. Su implementación efectiva requiere de la cooperación público-privada a todos los niveles.

Pero es un sector con múltiples elementos interconectados. El desafío es asegurar la consistencia y optimización de todos los eslabones de la cadena de suministro.  Todas las partes que intervienen deben evaluarse, desde los internacionales con transporte ferroviario, marítimo y aéreo y grandes almacenes; hasta los muy locales con bicicletas de carga y micro centros urbanos, pasando por los enlaces regionales e interregionales con todos los modos terrestres y almacenes medianos.

Es un sector de futuro altamente innovador e industrializado. Es actor de pleno derecho en la industria del futuro con inversiones crecientes en equipos, herramientas digitales y soluciones innovadoras: automatización de centros, digitalización de flujos de información, equipamiento ecológico para vehículos, terminales o producción de energía, innovaciones organizativas.

Para apoyar un sector innovador en sintonía con los grandes desafíos actuales, es fundamental proporcionar los medios para crear un ecosistema favorable dedicado a la innovación en el transporte y la logística. 

Es necesario instalar una gobernanza política sólida para las nuevas ambiciones logísticas. Incrementar la contribución del sector al servicio de la transición ecológica, Aprovechar mejor las cadenas de transporte y logística para desarrollar la economía y mejorar el atractivo de un sector del futuro que crea puestos de trabajo.

La región Mediterránea debe y puede hacer un mejor uso de la logística como palanca para su desarrollo económico y ecológico. La regionalización surge como una fuente inmensa de oportunidades, especialmente cuando permite reducir las barreras al comercio y los riesgos, Acortar las cadenas de logística hacia modelos de abastecimiento regionales, con nuevos centros de fabricación más cercanos y sistemas logísticos más equilibrados.

Puede que sea el momento de repensar la relación entre UE y el Mediterráneo e impulsar juntos un proyecto capaz de competir globalmente. La región mediterránea podría convertirse en una pujante frontera de producción norte-sur, ya que su situación geográfica permite acortar los circuitos logísticos entre la UE y África, y reducir la huella de carbono. Es una oportunidad histórica que no se puede perder.

Anwar Zibaoui, Opinión, La Vanguardia, 31 mayo 2022

domingo, 6 de marzo de 2022

Mujeres emprendedoras en estados frágiles

 

El espíritu empresarial es clave para impulsar la inclusión económica de las mujeres sobre todo en el sur del Mediterráneo y África, y especialmente en los estados frágiles.

Las desigualdades que afectan a las mujeres en el sector empresarial tienen raíces profundas que van desde factores culturales hasta el apoyo insuficiente ofrecido a las empresas lideradas por mujeres, la falta de marcos políticos que aborden la brecha de género y el reto de promover la conciliación familiar con el trabajo, entre otros.

La integración de las mujeres en la economía, en la región mediterránea y el continente africano, sigue siendo una asignatura pendiente, a pesar de los progresos realizados en algunos países.  Lamentablemente, la renta per cápita sigue siendo de las más bajas del planeta, la pobreza continúa afectando a amplias capas de la población y la coyuntura internacional ya no es tan favorable como en el pasado.

Por tanto, hace falta una acción seria para crear economías inclusivas y empleo femenino. En esta misión, los gobiernos juegan un rol fundamental a la hora de facilitar un marco legal para favorecer la creación de empresas, liberar el camino para el sector privado y redirigir la inversión pública hacia elementos intangibles, como la educación, la salud, I+D y la innovación.

Además, hay que promover el emprendimiento femenino y aumentar el número de mujeres empresarias, ya que ello favorecerá no sólo el crecimiento económico, sino que ayudará también acelerar la igualdad y reducir la brecha salarial. Se trata de favorecer la inclusión y promover la igualdad.

Para 2030, casi el 60% de la población empobrecida del mundo vivirá en estados frágiles sobre todo en África afectados aún por experiencias pasadas de violencia y que luchan por entregar a sus poblaciones las formas más básicas de gobernanza. Los vínculos entre la fragilidad y la desigualdad han sido la preocupación central de numerosos acuerdos internacionales, en particular, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que traza un camino para llegar a sociedades más equitativas y pacíficas. La igualdad de género y más específicamente el empoderamiento de las mujeres son componentes críticos para lograr esos objetivos.

Por esto hay que facilitar el intercambio de experiencias y mejores prácticas, e identificar medidas para mejorar el apoyo a las micro y Pymes dirigidas por mujeres en regiones devastadas por conflictos. La conmovedora experiencia de muchas de las mujeres emprendedoras de algunos países mediterráneos y africanos demuestra la importancia de apoyar a las mujeres como propietarias de negocios incluso en las circunstancias más difíciles, donde la seguridad y muchas de las necesidades básicas no están cubiertas, o cuando las mujeres se resisten e insisten en mantener los negocios existentes y emprender nuevas empresas para apoyar a sus comunidades locales.

Es importante apostar por programas para mejorar la resiliencia de las Pymes de mujeres en contextos frágiles como motores potenciales para la innovación, el empleo y una mejor calidad de vida. Promover estas empresas para aumentar sus oportunidades a través de la facilitación de inversiones directas e indirectas, así como mejorar su ecosistema empresarial y la formación y el crecimiento a través del desarrollo de capacidades empresariales, programas de subvenciones de contrapartida y apoyo a la orientación económica.

Las empresas están en una posición única para derribar los muros y las restricciones basadas en el género y en elementos culturales, abordando la desigualdad como uno de los aspectos centrales de los ODS y así facilitar el acceso al mercado laboral y a la vez mejorar la retención de empleo femenino. Las empresas pueden responder de manera mucho más eficaz a las necesidades de las mujeres afectadas por las guerras y conflictos.

Pero las prácticas comerciales inclusivas pueden no ser suficientes para eliminar las desigualdades estructurales que afectan a las mujeres. Es necesario un cambio sistémico, que aborde los numerosos aspectos que dificultan el camino. Por ejemplo, sin una identidad legal, es imposible, para las mujeres poder acceder y tener derecho a la propiedad de la tierra en algunos países, lo cual es esencial para la vida de las mujeres. A esto hay que añadir, la necesidad de acometer cambios en el sistema financiero orientados a favorecer el empoderamiento de las mujeres y establecer incentivos para la inversión, proporcionando activos que puedan ser apalancados para el desarrollo empresarial, y que ofrezcan una base sólida para la estabilidad financiera.

En África hay una de las tasas más altas del mundo, con 7.5 millones de microempresas y pymes que trabajan en el sector formal liderado por mujeres, y cuatro veces más en el sector informal. Las mujeres pueden jugar un papel clave cuando los esfuerzos se dirigen a cerrar y financiar las brechas económicas. Muchas dominan sectores clave de la economía. Una mujer emprendedora exitosa, guía a otras y contribuye con su ejemplo a reducir las barreras que crean brechas de género cuando se trata de acceder a oportunidades.

Existen también historias de coraje y ambición en el Mediterráneo protagonizadas por mujeres empresarias. Iniciativas innovadoras, con gran impacto en su comunidad y que están cambiando mentalidades. Si bien el número de mujeres empresarias en el Sur del Mediterráneo y África se encuentra en ascenso con una participación del 22%, pero lejos del promedio mundial del 33%. En definitiva, es imprescindible continuar avanzando para favorecer la inclusión económica de las mujeres en la economía formal y mejorar sus ingresos su participación en la economía aumenta la clase media y reduce las desigualdades.

Anwar Zibaoui, Opinión, Atalayar,  6 marzo 2022

https://atalayar.com/blog/mujeres-emprendedoras-en-estados-fr%C3%A1giles


lunes, 10 de mayo de 2021

Hacia una industria agroalimentaria mediterránea sostenible

 En el Mediterráneo, el sector agroalimentario ha mostrado una fuerte resistencia frente a la crisis de COVID-19, tanto en la producción como en la distribución. No obstante, el episodio de la pandemia hizo patente la crucial importancia de la soberanía alimentaria para esta región que está experimentando, por un lado, el crecimiento demográfico y, por otro, el impacto del cambio climático.

La COVID-19 ha generado una mayor conciencia sobre la importancia de la industria alimentaria, así como sobre su seguridad y sostenibilidad entre productores, empresas, gobiernos y consumidores. La producción agrícola es uno de los pilares de la economía, ya que representa el 3% del PIB mundial y casi el 30% del empleo global.

Sin embargo, los mercados agrícolas son inestables y reaccionan a pronósticos especulativos de los operadores experimentando variaciones en los precios, tal y como pasó en 1974, 1986, 1996 o 2008. Los fuertes aumentos de precios desencadenan disturbios y revueltas entre los consumidores, además de una alta inestabilidad de ingresos para los productores: las pymes agroalimentarias y granjas.

Además, debido a la globalización de los mercados, las cadenas agroalimentarias se han fragmentado, lo que las hace más vulnerables a las crisis económicas y de salud. Estas crisis, que se suman a la degradación de los recursos naturales (tierra, agua, biodiversidad) y al cambio climático, cuestionan directamente el sistema alimentario agroindustrial.

Agua para una industria agroalimentaria mediterránea sostenible

Los efectos del cambio climático en la región mediterránea están por encima de la media global. Algo que tendrá consecuencias sobre el bienestar humano en general y sobre el sector agrícola en particular.

El cambio climático y la escasez de agua en el Mediterráneo acrecentarán el impacto de los diferentes conflictos y retos. La mayoría de países han empezado a sufrir las consecuencias de la contaminación y sus efectos sobre la población y la vida. Existe una creciente conciencia de que la situación afecta a todo el mundo y no tiene nacionalidad, religión, ni ideas políticas. Por tanto, la situación exige movilizar y construir a nivel regional un medio ambiente sostenible.

El agua es un elemento vital en el Mediterráneo debido a cuestiones culturales, económicas y sociales. La historia de la región siempre ha ido unida al clima y la dieta. No hay que olvidar que los productos de la tierra dependen del cielo, y es precisamente la gran escasez sufrida a lo largo de la historia la que ha llevado agua a ser tan altamente apreciada, ya que sin ella la supervivencia, el desarrollo o la migración no habría sido posibles.

Se espera que la demanda de agua se incremente entre un 4% y un 22% para poder satisfacer las necesidades de la agricultura y compensar el crecimiento de la población.

Es imprescindible formular un nuevo consenso regional. Hay que dar pasos hacia el futuro y crear una industria agrícola eficiente y resistente al clima. Porque, sin un enfoque para romper las tendencias de despilfarro, sin una mayor cooperación y sin alternativas renovables, los países de la región no lograrán la sostenibilidad y el estrés hídrico aumentará inevitablemente.

Este es el primer paso hacia un futuro que debe aumentar la cooperación entre las riberas del Mediterráneo, y que requiere medidas para ordenar los usos, así como para proteger el ecosistema.

Construcción de nuevos sistemas

Es el momento de realizar planteamientos eficientes. Las dietas alimentarias patrimoniales, como la Dieta Mediterránea, deben ser la base para la construcción de sistemas alimentarios regionales basados en proximidad, solidaridad y autonomía y, por lo tanto, que sean más resistentes a las crisis económicas, sociales, de salud o clima.

Al movilizar la agroecología, la bioeconomía circular y la gobernanza participativa, estos sistemas tienen la capacidad de garantizar un desarrollo local sostenible recuperando el mercado interno de los productos locales. Todo ello permite contribuir a reducir las fracturas territoriales revitalizando las zonas rurales y también exportar a un mercado internacional más concienciado.

Hacia la sostenibilidad de la industria agrícola

La industria agrícola ha pasado en las últimas décadas por una fase de innovación. Ahora, la seguridad alimentaria, las nuevas tendencias y la sostenibilidad significan más oportunidades para las pymes agroalimentarias, tan necesarias para apoyar la seguridad alimentaria mundial.

Digitalizar el sector con el fin de aumentar la producción agrícola y hacer frente a los riesgos climáticos ha demostrado su relevancia, pues promueve la cadena de valor en términos de productividad, trazabilidad, calidad, acceso al mercado o control de la salud.

A pesar de que las nuevas empresas agrícolas mundiales invirtieron casi 20 mil millones de dólares en tecnología digital en el Mediterráneo en 20119, las empresas están luchando por lograr un buen desempeño. Están decididas a asumir el desafío de la digitalización para conseguir una agricultura moderna, competitiva, global y sostenible con los recursos que sean necesarios, intentando así convertirse en un centro importante para la digitalización de la agricultura, dada la infraestructura de comunicaciones eficiente y el acceso a la información del que disponen. La transformación digital de la agricultura aumenta el atractivo del sector y ofrece oportunidades de empleo a los jóvenes en un mercado laboral más dependiente de la tecnología.

Sin embargo, hay opciones. Es posible implementar estrategias para lograr una industria alimentaria sostenible ayudando a los agricultores y pequeños productores. Es preciso eliminar las barreras. Por ejemplo, es preciso invertir en energías renovables como la eólica, solar o hidroeléctrica, a través de asociaciones público-privadas para aumentar el suministro de electricidad y facilitar la producción y el procesamiento local de alimentos.

Es posible mejorar las infraestructuras, carreteras, y caminos para conectar las zonas productoras rurales y agrícolas con los mercados, además de facilitar subsidios directos a los productores rurales, que son los que pueden evitar el hambre, la pobreza extrema y la emigración. Atraer inversiones internacionales hacia el sector agroalimentario regional puede incrementar el volumen de productos regionales e internacionales de manera significativa y sostenible. Algo que también promoverá el empleo equitativo entre hombres, mujeres y jóvenes.

Es urgente una nueva visión que pase por la asociación del sector agrícola y alimentario en el Mediterráneo, basado éste en redes de desarrollo conjunto que ayuden a superar las crisis actuales y futuras.

El potencial de la región mediterránea

Europa cuenta con un sector agroalimentario cooperativo y privado ansioso por desarrollarse en el Mediterráneo y, a través de la orilla sur, llegar al continente africano. Las empresas europeas tienen además un musculo financiero, medios que brindar a las empresas de la región, y conocimientos técnicos, más allá de la condición de mero proveedor. El Mediterráneo sur y oriental, así como el África oriental y meridional, ofrecen importantes posibilidades de expansión para las empresas europea. Por otra parte, la Zona de Libre Comercio Continental Africana, que entró en vigor el pasado 1 de enero, pronto conectará a 1.300 millones de personas, creando un bloque económico de 3,4 billones de dólares. El potencial de la región mediterránea es considerable en cuanto a que indicadores financieros alentadores pueden combinarse con objetivos reales de desarrollo sostenible.
 
El destino de Europa y África está vinculado, y el Mediterráneo es el espacio natural de este eje. Es por ello por lo que hay que aunar voluntades, defender los intereses convergentes y apostar por una mejor cooperación. Se debe romper con los miedos y dibujar el futuro de las próximas generaciones.

Varios medios, Sector agroalimentario, Opinión, 29 abril 2021

https://www.igpmanzanillaygordaldesevilla.org/hacia-una-industria-agroalimentaria-mediterranea-sostenible/ 

https://www.oleorevista.com/?p=382363

 


 

viernes, 30 de abril de 2021

Canal de Suez y Cadena Logística : Lecciones post pandemia

 

El mega-buque de contenedores "Ever Given" ha sido liberado, y el Canal de Suez vuelve a ser transitable. Considerado como una de las rutas comerciales más cortas y efectivas del mundo, el Canal ha servido al mundo durante más de 160 años, ya que es una forma más rápida y rentable de transportar productos desde Asia a Europa que el antiguo camino del Cabo de Buena Esperanza.

 Para Egipto, es una importante fuente de ingresos, unos 5.000 millones de dólares. Se estima que el costo de esta crisis es ha sido de 9.000 millones de dólares de pérdidas comerciales por día.

La crisis del Canal de Suez, junto con la pandemia Covid-19, marcarán el surgimiento de una nueva escuela de pensamiento de la logística comercial: ¿Pasará la gestión de la cadena de suministro global del "just-in-time”  al “just-in-case”? Las cadenas de suministro se acortarán y los bienes esenciales se producirán cada vez más a nivel regional o local. La globalización puede dar lugar a una mayor regionalización. ¿Menos eficiencia pero mucha más seguridad?

Cadena Logística

El transporte marítimo constituye un pilar fundamental de la economía mundial. Por mares y océanos circulan más del 80% de las mercancías y alrededor del 50% del petróleo consumidos globalmente y juega un importante papel en las llamadas cadenas de suministro, en las cuales los múltiples componentes de un mismo producto son elaborados en distintos países.

El restablecimiento del tráfico es una buena noticia, pero teniendo en cuenta los difíciles momentos que vivimos, la mejora de la logística del comercio debe ser un asunto de todos. Porque la logística es necesaria para la economía incluso para sobrevivir. Por ejemplo, afecta directamente el precio y la disponibilidad local de alimentos, e influye directamente en los costes de exportación, importación y distribución interna y son parte integral de cada negocio. El sector es vital para la economía, un gran apoyo para el ecosistema industrial y una verdadera palanca para el crecimiento y la competitividad.

En un mercado global, la necesidad de ofrecer mejoras en costes y usar los recursos de modo eficiente obliga a las cadenas logísticas a prestar una atención máxima a los aspectos asociados a la intermodalidad, los hubs o los puertos. La internacionalización requiere poner un especial énfasis en el rendimiento global de las redes de distribución y suministro, pero también en la regionalización de sectores que se benefician de la proximidad geográfica y la complementariedad económica.

Lecciones post Pandemia

El incidente demuestra que el control del flujo logístico es clave para la seguridad económica global. El mundo occidental  analiza continuamente los mercados mundiales y los posibles aumentos de precios o escasez de productos, centrándose en el petróleo y el gas. Pero, deberían revisarse mejor los puntos de estrangulamiento, la seguridad marítima, la geopolítica y la globalización. Porque, hay un cambio drástico en los equilibrios, y China esta irrumpiendo con fuerza en el tablero de juego.

El sueño del comercio global, entrelazando las economías y sociedades hasta un punto sin retorno, se ha visto afectado por la realidad.

El bloqueo del canal y el Covid 19 han mostrado en poco tiempo lo que podría ser un efecto de tsunami o mariposa en el comercio mundial si no se evalúa correctamente. Dado que el comercio marítimo es vital para Europa es necesario encontrar nuevas opciones que hagan que las rutas sean más eficientes. Se necesita analizar y decidir cómo cambiar la producción y el transporte, de manera que se puedan contrarrestar mejor estos riesgos futuros.

La mayoría de los centros de fabricación y las economías de todo el mundo dependen de suministros rápidos y fiables. Pero, el modelo de abastecimiento global que alguna vez prevaleció en las cadenas de valor impulsadas por productos de bajo coste ha disminuido a medida que las nuevas tecnologías y los patrones de demanda de los consumidores evolucionan. Acortar las cadenas de logística hacia modelos de abastecimiento regionales, con nuevos centros de fabricación más cercanos y sistemas logísticos más equilibrados

Amenazas como el bloqueo por un buque comercial podrían ser vistas por terceros como una opción fácil para golpear duramente a los adversarios. Es importante abordar los riesgos económicos y militares inherentes de la globalización y las rutas comerciales restringidas por factores geográficos, es el momento de repensar como fortalecer la economía en un mundo post-pandemia.

Periodico  EL MUNDO, Estratégia y Negocios, Artículo Opinión, 22 Abril 2021

https://www.elmundo.es/economia/actualidad-economica/2021/04/22/607eb326fc6c83a5048b4655.html



viernes, 19 de febrero de 2021

Internacionalizar en estos tiempos


  El mundo está cambiando a un ritmo acelerado por los efectos de la pandemia, el progreso tecnológico, los factores geopolíticos, el cambio climático y el proteccionismo. Esta evolución trae incertidumbre y riesgo e influye en las decisiones de las empresas en su proceso de internacionalización o exportación. 

Exportar o internacionalizarse, se ha convertido en un imperativo inaplazable para muchos países y empresas. Ya no se trata de una salida para la recuperación, en la etapa postcovid-19, es una apuesta estratégica a largo plazo.

Muchos factores preocupan a los empresarios, cómo seleccionar el mercado y desarrollar un plan de expansión, el crédito comercial o financiero, la legislación,los idiomas, la cultura,... y no menos importante, la seguridad y el riesgo en países en conflicto. Muchos no están preparados o formados para gestionar estas realidades, lo que provoca malentendidos, pérdidas y daños para las empresas. Es preciso elaborar y aplicar estrategias que respondan de manera significativa y creativa a las situaciones de desconfianza o profunda incertidumbre.

Internacionalizar no es improvisar. La internacionalización significa conocer los mercados y predecir los riesgos y complejidades que se derivan de las leyes locales, las burocracias nacionales, el funcionamiento de los sistemas judiciales, y por supuesto, de las variables geopolíticas.
Trabajar y hacer negocios en otro país implica tener que tratar con un entorno que en ocasiones es muy distinto del propio. Una estrategia de expansión internacional permite reducir riesgos. Enviar directivos a zonas de conflicto requiere análisis y gestión de riesgo, establecer alianzas locales y evaluar las credenciales de los directivos o instituciones en estas zonas convulsas.
 
Las empresas deben prepararse, desarrollar modelos de negocio flexibles para responder a nuevas oportunidades y amenazas y tener equipos capaces de gestionar la aventura internacional.

Las empresas deben considerar la innovación a nivel internacional como uno de los ejes de desarrollo para diferenciarse y seguir siendo competitivas. Cada vez es más necesario un colchón de seguridad para evitar casos como los de las compañías españolas nacionalizadas en América Latina.

La apuesta ganadora es una alianza público-privada en las exportaciones. La intuición y creatividad del emprendedor combinadas con la fuerza y apoyo de la red diplomática, así como de las agencias y organismos de apoyo a la internacionalización. El desarrollo de un programa global de internacionalización permite que las empresas conozcan mercados muy distantes y diferentes. Esto implica el dominio del proceso de investigación a gran escala, y la capacidad de analizar adecuadamente la información para tomar la decisión acertada.

Una eficiente gestión de la internacionalización y una buena planificación consiguen no solo el logro de los objetivos, sino también una disminución considerable de los riesgos.

La diplomacia económica es el camino del Estado para conseguir que sus empresas se conviertan en "agentes diplomáticos" del país, de manera que los éxitos de las empresas beneficien la reputación del país y sus relaciones internacionales. Decían en el siglo XIX que por donde no pasan las mercancías, pasarán los ejércitos. Más exportación o internacionalización significa más producción, más empleos, más ingresos y mayor crecimiento.

Internacionalizarse es atreverse a saltar a lo desconocido pero hay que conocer qué es lo necesario para alcanzar los objetivos.

La vanguardia, enero 2021.

jueves, 18 de febrero de 2021

Hoteles, los tiempos estan cambiando

 Duramente golpeada por la pandemia del Covid-19 desde el primer trimestre de 2020, la industria hotelera se ha visto gravemente afectada por la cancelación de reservas y eventos y las restricciones de viaje. y la incertidumbre sobre la vacuna significa que tardarán en recuperarse a los niveles anteriores. 

Se necesita un apoyo continuo para mantener a flote la industria, pero el objetivo más importante es crear un sector hotelero más resistente y sostenible que sea capaz de resistir las grandes crisis futuras.

La  región mediterránea tiene 20% de la capacidad de alojamiento hotelero a nivel mundial, los 24 países mediterráneos cuentan con 10.000 destinos, unos 100.000 hoteles y un millón de restaurantes.

Pero esta industria a menudo vive al límite. Ahora debe enfrentarse a la pandemia, pero antes tuvo que enfrentar actos de terrorismo y asesinato sin sentido, la naturaleza  también planteó más desafíos, desde terremotos, huracanes o tornados hasta sequías, además de otras epidemias, o crisis económicas. Lo que ocurre en el mundo afecta al sector hotelero .

La pandemia ha expuesto vulnerabilidades del sector en la región, incluida la sobreoferta de capacidad hotelera, la burocracia, una falta de flexibilidad e innovación y, lo más importante de todo, una colaboración inadecuada entre todos los actores del sector .

Si bien las autoridades gubernamentales son esenciales para permitir el cambio en el sector, Es necesario impulsar medidas para proporcionar un marco que pueda ser utilizado por todos los involucrados y ayudar a crear una industria más resistente y sostenible.

Diferentes datos estiman que la cifra de llegadas globales será de 938 millones en 2020, una caída dramática de los 1.500 millones pronosticados, Incluso la cifra de 938 millones podría descender, dependiendo de cuándo se vuelvan a abrir las fronteras y regresen los vuelos, y del éxito con el que se gestionen las preocupaciones sobre la seguridad de los viajes. Se espera una recuperación lenta en la industria hotelera de la región, pero será irregular, y se espera que algunos mercados regresen más rápidamente que otros.

Una industria hotelera posterior a Covid necesita apoyo urgente. Hace falta proporcionar alivio a las empresas durante la crisis. Crear un entorno empresarial cooperativo para todas las partes interesadas. Promover un modelo de operación eficiente para hoteles. Mantener los más altos estándares de seguridad para el bienestar del personal y los visitantes e impulsar la adopción de las últimas tecnologías, innovación y digitalización..

Es urgente analizar con las autoridades  los impuestos que gravan al sector, la seguridad de los hoteles, la movilidad laboral, el desarrollo sostenible, la formación, la clasificación y estandarización para realizar sus propias certificaciones y la promoción de la dieta o alimentación Mediterránea.

El sector hotelero debe enfrentarse a los desafíos y saber qué medidas de crisis adicionales se pueden tomar para ayudarle desde los gobiernos y qué se puede hacer para aumentar la colaboración en la industria del turismo. ¿Qué acciones pueden garantizar la sostenibilidad del sector de la hostelería? ¿Cómo puede el sector aumentar la eficiencia? ¿Cómo se puede mejorar el bienestar de los trabajadores y la seguridad del cliente?

La industria hotelera mediterránea carece de un organismo formal que pueda reunir a todas las partes de la industria en un foro y actuar como una voz para el sector hotelero y representar y coordinar sus intereses compartidos. Hace falta establecer un organismo  único que actúe como foro y voz del sector de la hostelería mediterránea para fomentar una mayor colaboración y unidad. para compartir recursos, asegurar precios, renegociar contratos, brindar soporte legal para disputas, comunicarse con los gobiernos. y mejorar la capacidad de continuar atrayendo turistas, con el fin de afianzar la posición  de liderazgo  a nivel mundial.

Establecer una iniciativa de la industria hotelera mediterránea para ayudar a los hoteles a desarrollar su presencia en línea y reducir la dependencia.  Disponer de tecnología para reducir el riesgo de infección. Con ingresos reducidos, los propietarios de hoteles no están actualmente en condiciones de invertir. Todas las partes interesadas de la industria pueden contribuir a la adquisición de tecnología para mejorar los estándares de salud y seguridad en los hoteles

Las cadenas hoteleras están introduciendo sistemas de auditoría global para certificar que los hoteles están limpios y seguros. Un gerente de salud y seguridad dedicado garantiza que se sigan los protocolos de limpieza y desinfección y que se realicen controles periódicos de salud del personal.

Además de una reducción de impuestos o servicios públicos, hay que  ofrecer apoyo financiero lo que garantizará que los hoteles sigan siendo viables. Los bancos deben ayudar a la supervivencia hotelera mediante la eliminación temporal de los cargos financieros y brindar otras soluciones financieras flexibles a los clientes que se han visto afectados por la crisis.

Aún no se conoce el impacto a largo plazo de Covid-19 en el turismo, y sabemos que pasará algún tiempo antes de que el número de visitantes vuelva a los niveles anteriores. Por tanto, es fundamental que el desarrollo futuro del ecosistema hotelero se realice de forma cuidadosa y considerada, para gestionar el suministro y proporcionar el tipo de producto correcto para satisfacer las demandas futuras del mercado.

Impulsar  la cooperación para consolidar el liderazgo  y ampliar la cuota de mercado turístico del Mediterráneo y extraer el máximo partido de esta capacidad  será necesaria para generar ingresos, crear puestos de trabajo, reducir la brecha.

Sin embargo, se debe asegurar que su recuperación y expansión beneficie a toda la población, y está en línea con los Objetivos de Desarrollo, el desafío que plantea  esta pandemia y el cambio climático, fundamental para la perdurabilidad a largo plazo

Anwar Zibaoui, Barcelona, 28 enero 2021.

https://atalayar.com/blog/hoteles-los-tiempos-est%C3%A1n-cambiando

https://www.cronicaeconomica.com/hoteles-los-tiempos-estan-cambiando-151766.htm

https://www.territoriobitcoin.com/hoteles-los-tiempos-estan-cambiando/ 

https://elcandelerotecnologico.com/2021/01/28/hoteles-los-tiempos-estan-cambiando/ 

https://www.eldigitalcastillalamancha.es/el-comentario/978391465/Hoteles-los-tiempos-estan-cambiando.html 

https://haycanal.com/noticias/15637/hoteles-en-tiempos-digitales 

 



jueves, 24 de septiembre de 2020

Salvar el textil Mediterráneo

El sector textil Mediterráneo ha sufrido pérdidas millonarias y cierres de empresas debido a la pandemia del COVID-19. 

De manera ejemplar, algunas empresas han reorientado su producción para atender la crisis sanitaria, pero la caída de la demanda afecta a todos los países de la región, en los que el sector textil es muy importante para las economías locales.

Ante esta situación excepcional, el sector debe repensar su posición en el mercado y apostar por la sostenibilidad. El textil es una industria clave que emplea a millones de trabajadores y puede generar un gran número de empleos. El Mediterráneo puede competir con cualquier región del mundo en rapidez de comunicaciones, logística, infraestructuras, mano de obra cualificada, acceso a materiales textiles nuevos y de alta calidad, creatividad y talento para producir. 

La fabricación de máscaras en la región fue un soplo de aire fresco  que ayudó a disminuir el impacto del coronavirus y demostró la imaginación y la inventiva específicos del sector textil. Ahora, es necesario un plan de recuperación real y tomar medidas para salvar el sector y reiniciarlo en este contexto de crisis. Un nuevo modelo de desarrollo, fortalecido, que implica un modelo productivo más sostenible con el medio ambiente y la sociedad, y modernizado por las tecnologías disponibles.

El sector textil, una de las industrias más importantes del mundo, es una industria valorada en 2.500 millones de dólares y emplea a más de 60 millones de trabajadores en toda la cadena productiva, siendo un verdadero motor de desarrollo para la región Mediterránea.

Es obvio que la industria textil mediterránea debería también rediseñar su huella social y ambiental. Y tener en cuenta los recursos naturales, los problemas de la contaminación, la explotación de personas o animales, la producción y distribución desigual de sus productos. Se trata de un negocio global valorado en más de un billón de dólares, pero debe reinventarse.

Además, la cuarta revolución industrial está aquí, ya está impactando en el negocio textil a través de tecnologías de fabricación digital, fabricación aditiva, impresión 3-D y nuevas técnicas de diseño computacional. Por tanto, ha llegado el momento de que la industria textil mediterránea se una para abordar el rápido ritmo de cambio y sumarse a la cuarta revolución.

              Salvar el textil Mediterráneo

Se pueden tomar muchas medidas, tales como potenciar el valor del "Made in Mediterranean" a través de la acción público-privada en la comunicación mediática, o desarrollar una etiqueta que simbolice la calidad, el respeto por el consumidor y el medio ambiente. 

También es posible aprovechar la destacada posición del Mediterráneo como productor textil para fortalecer la lucha contra el contrabando y la subfacturación de importaciones. Promover el consumo y las inversiones textiles regionales. Promover asociaciones sostenibles entre minoristas y fabricantes con una reorganización de la producción basada en la flexibilidad, la rapidez y el nearshoring. Por otra parte, se debe proteger a los trabajadores en las cadenas de suministro y hacer frente a la falta de protección de trabajadores informales 

La pandemia ha revertido la globalización, concienciando de la importancia de las cadenas de suministro regionales, más cortas y simples y por tanto más eficientes, y aprovechando la mano de obra local e impulsando la innovación y el desarrollo de las nuevas tecnologías .

Es conveniente apoyar el retorno hacia la región de un determinado número de actividades industriales, que fomenten la economía mediterránea local. El Mediterráneo ofrece la ubicación ideal como base alternativa a Asia Lejana, acortando los circuitos logísticos con la Unión Europea y reduciendo la huella de carbono.

La industria de la moda se ha reinventado en numerosas ocasiones, ahora debe participar en esta revolución hacia la sostenibilidad, más allá de la próxima temporada. Hay buenas perspectivas para la zona, se promueven las asociaciones entre empresas mediterráneas para competir mejor en el mercado internacional, y se crean plataformas que promuevan y atraigan inversiones a la región.

Es el momento de apostar por creativos apasionados por los nuevos valores en la moda, el diseño, la innovación y la sostenibilidad, facilitando las herramientas y oportunidades para influir en las decisiones y crear nuevas perspectivas. El sector textil mediterráneo debe sin duda explorar el potencial de la colaboración.

Durante mucho tiempo, la industria textil y de la confección ha dominado los intercambios comerciales en el Mediterráneo. Hoy, sigue desempeñando un papel principal en la mejora de las condiciones económicas, especialmente en el sur del Mediterráneo, donde el sector es de importancia clave

Alrededor del 40% del comercio europeo de textiles y prendas de vestir va a la región mediterránea. La visión de un desarrollo bilateral dirigido a crear un mercado totalmente integrado debería crear una situación de beneficio mutuo para ambos lados del Mediterráneo. 

https://www.economiadehoy.es/salvar-el-textil-mediterraneo

https://www.territoriobitcoin.com/salvar-el-textil-mediterraneo/

https://empresaexterior.com/art/75588/salvar-el-textil-mediterraneo

https://elcandelerotecnologico.com/2020/09/17/salvar-el-textil-mediterraneo/

https://www.ticpymes.es/tecnologia/noticias/1120768049504/opinion-salvar-textil-mediterraneo.1.html

https://haycanal.com/noticias/14987/salvar-el-textil-mediterraneo

https://www.cronicaeconomica.com/salvar-el-textil-mediterraneo-147470.htm

https://www.moroccoworldnews.com/2020/09/320436/save-mediterranean-textile/

https://atalayar.com/blog/salvar-el-textil-del-mediterr%C3%A1neo

https://innovadores.inndux.com/es/salvar-el-textil-mediterraneo/

https://www.muypymes.com/2020/09/21/como-repensar-el-sector-textil-mediterraneo-despues-de-la-irrupcion-de-la-pandemia-del-covid-19

http://www.manlyinterlinings.com/crisis-o-oportunidad-en-el-textil/?_thumbnail_id=2029


viernes, 28 de agosto de 2020

Beirut, el sol volverá a salir

Un inmenso daño ha causado la doble explosión que ha devastado Beirut, la capital libanesa. La muerte, el sufrimiento y la destrucción han golpeado a un país que ya estaba en estado de shock dejando miles de heridos, más de un centenar de muertos, 300.000 personas sin hogar y unas pérdidas materiales estimadas en más de tres mil millones de dólares.

Cualquiera sea la causa, el gigantesco hongo naranja y gris que se elevaba sobre el puerto de Beirut evoca implacablemente la implosión del sistema y las estructuras políticas de un país devastado desde hace años por múltiples crisis económicas, políticas, sociales y ahora sanitarias, como consecuencia de la pandemia por Covid19, conflictos interminables que han provocado la caída sin freno de este pequeño país.

El Estado libanés moderno, con un siglo de vida, ha sufrido experiencias desconocidas para otras naciones con historias milenarias: una larga guerra civil de 15 años, invasiones extranjeras, malestar socio-político, terrorismo y además hoy es el país con la mayor tasa de refugiados por habitante del mundo, una densidad enorme que ha tenido un efecto devastador. El país sigue sumido en un conflicto regional que trasciende sus fronteras lo que ha creado una conmoción sin precedentes en su tejido social, político y económico. Líbano ha sobrevivido a todos estos choques. Pero con esta nueva catástrofe no hay señales de ningún respiro para el país de los cedros.

Beirut, en el corazón de Oriente Próximo, en la otra orilla del Mediterráneo, es una ciudad plural, desconcertante, fascinante y adictiva. Tras milenios de ocupaciones de diferentes imperios, y una larga historia de emigraciones forzadas que han traído de vuelta influencias de todo el mundo, se ha convertido en una fusión cultural, política y religiosa única.

Hoy está reconocida como una de las ciudades más antiguas del mundo, otomanas y francesas, y a pesar de vivir tiempos difíciles por décadas de invasiones o la guerra civil, pocos signos quedan de la destrucción. Y, en el caos, en el choque de ideas, edades y visiones, Beirut ha generado algunas de las mentes más innovadoras: escritores, músicos, arquitectos, diseñadores inspirados por las contradicciones y la energía de esta ciudad donde todo es posible, incluso si no está permitido.

En los 20 años previos al estallido de su guerra civil, en 1975, la pequeña capital de este estado frágil y complejo atrajo todo tipo de gentes e ideas. Se publicaron diarios sin censuras. Los bancos locales se llenaron de depósitos de los estados del Golfo. Se cuadruplicó el área construida. Beirut atraía a pensadores, artistas, espías y empresarios de todo el mundo.

Hoy, tras nuevas guerras e invasiones, y nuevas crisis y recuperaciones, la ciudad es el verdadero termómetro de la región, para bien o para mal.

A unos centenares de kilómetros de Beirut, está prohibida la vida nocturna. Se prohíbe hablar de historia o literatura, del respeto a las minorías, de la libertad de expresión, de los derechos de la mujer, de los derechos de los homosexuales o de la laicidad. Beirut es un soplo de aire fresco en una región donde estos y otros temas no pueden todavía expresarse sin denuncia.

Aunque todo esto puede cambiar. Líbano está lejos de ser el país de las maravillas. Está acosado por graves desafíos internos y externos, y una clase política que es un mosaico de alianzas contradictorias basadas en su supervivencia por encima de todo y controlada por los grandes actores regionales. Al Líbano le cuesta aprender la lección y aceptar que es una nación de minorías donde todos pueden vivir, y donde la convivencia es posible si hay voluntad.

La guerra civil terminó hace 30 años, pero la política todavía está dominada por ex caudillos y dinastías familiares enredadas en divisiones sectarias. Mientras tanto, la gente tiene demandas y aspiraciones, como estabilidad, electricidad, agua, recogida de basuras, empleo juvenil, seguridad, oportunidades económicas y un estado que refleje esas demandas y su diversidad.

Cuando el Líbano sangra, todo el mediterráneo sufre con él. La solidaridad internacional debe ejercerse plenamente y acorde con las pérdidas y la destrucción. Es necesaria y urgente la actuación de la Unión Europea y las Naciones unidas. La catástrofe que azota Beirut es una tragedia para los libaneses que se añade a otras tantas que sufre y ha sufrido este pueblo. No hay palabras suficientes para describir la situación.

Pero, a pesar de todo, el sol volverá a salir. Los libaneses siguen siendo un pueblo resistente a las incertidumbres, con una red sin igual de emigrantes por todo el mundo. Desde tiempos remotos, Beirut es un puente entre el este y el oeste, la puerta natural hacia y desde la región. Centro comercial, financiero y universitario. Mestiza, con su rica cultura, y su sociedad vibrante. Ocupada y destruida en varias ocasiones, pero tras ocho mil años, siempre renace como el ave fénix. De hecho, no es ninguna sorpresa su reconocida capacidad de recuperación.


viernes, 14 de agosto de 2020

Gas Mediterráneo, ¿Un dividendo o un desafio?


  Los recientes acontecimientos que han tenido lugar en el Mediterráneo oriental por la batalla del gas originan perspectivas peligrosas en las relaciones entre los países vecinos de la región.

El descubrimiento de los últimos yacimientos de gas está incrementando la agitación regional, provocando diversas reacciones: la tensión entre Turquía, Grecia y Chipre; entre Líbano e Israel; la ausencia de una ley de demarcación de límites marítimos entre Líbano, Israel y Chipre, o la guerra en Siria y el apetito de otros jugadores externos como Rusia, China y Qatar, provocan una situación volátil y altamente complicada.

Estos descubrimientos han generado nuevas expectativas en el mercado mundial de la energía; plantean nuevos retos para gobiernos y actores internacionales, e inician la carrera para explotar la riqueza descubierta. Además, tienen implicaciones económicas regionales, ya que probablemente se podría convertir el Mediterráneo oriental en una de las principales áreas globales de suministro de gas. Los recursos de la región se estiman en 122 trillones de pies cúbicos de gas, además de 1,7 millones de metros cúbicos de petróleo en las costas de Siria, Líbano, Chipre, Israel, Egipto y Palestina.

Estados Unidos y Rusia, los mayores productores mundiales de gas natural, están preparados para desempeñar un papel en la intermediación y el beneficio de las próximas crisis. Todo ello conlleva que las potencias europeas, a pesar de ser las principales beneficiarias de esta riqueza, podrían quedar relegadas.

A la región mediterránea no le sobran conflictos ni desafíos estratégicos para los próximos años, y hay muchos factores que se unen para desencadenar una posible crisis. Por ejemplo, los planes de expansión de Turquía en el Mediterráneo, un conflicto que casi desencadena una guerra entre Turquía y Grecia hace unas semanas y que se evitó por los esfuerzos y presiones realizados por la canciller Angela Merkel. Al mismo tiempo, la tensión prevalece en el frente libio, con el riesgo de un conflicto egipcio-turco. En cualquier caso, Europa se encuentra involucrada en luchas de poder y energía en el Mediterráneo.

En la era del eclipse europeo dentro del escenario de las relaciones internacionales, Francia, Italia y España intentan mantener la presencia europea activa en el Mediterráneo porque constituye, junto con Asia occidental y África del Norte, una extensión de la seguridad económica y estratégica europea. Por lo tanto, Europa estaría cometiendo un grave error si la seguridad del Mediterráneo oriental se deja en manos de otras partes.

La seguridad energética es una preocupación fundamental. La UE debería disponer de alternativas para diversificar sus fuentes de suministro, así como sus riesgos políticos y económicos, además de limitar su dependencia del gas ruso, que representa el 38% de sus importaciones. La crisis en Ucrania y la posibilidad de una interrupción en el suministro de gas a Europa muestran la necesidad de obtener soluciones, y los recientes y grandes descubrimientos en el Mediterráneo oriental dan a la UE la opción que justamente está buscando.

Las cantidades globales pueden justificar un nuevo gasoducto entre el Mediterráneo oriental e Italia y el resto de Europa. Desde el sur del Mediterráneo, ya están los gasoductos que transportan el gas desde Argelia a la UE, a donde se dirige el 70% de la producción del país magrebí. Argelia es el tercer exportador mundial de gas con una capacidad de producción de 80.000 millones de pies cúbicos de GNL. Pero sería necesario completar el gasoducto MIDCAT a través de los Pirineos catalanes, cuya capacidad prevista es precisamente de 8.000 millones. Eso convertiría a España en país ‘hub’ o de tránsito, proporcionándole así grandes ingresos y beneficios económicos.

Una de las ventajas de la explotación de gas mediterráneo no es solo la gran oportunidad de desarrollo y crecimiento para los nuevos países productores, sino también para la UE, que para el año 2030 necesitará importar unos 113.000 millones de metros cúbicos anuales.

Hasta el 2035, se espera que la demanda de gas natural crezca en un promedio del 1,9% al año, superando a todas las demás fuentes de energía. Se prevé también que el consumo mundial de energía crezca un 41% hasta 2035.

Los riesgos internos y geopolíticos son las principales causas de todo esto. Algunos países tendrán que unir sus fuerzas si quieren aprovechar sus recursos y encontrar las mejores soluciones económicas y estratégicas para optimizar sus operaciones. Deberán tener en cuenta que explotar esas enormes reservas de gas y atraer la inmensa inversión extranjera no será posible sin promover un entorno pacífico y estable entre ellos.

Esta crisis de la COVID-19 nos recuerda la importancia del colectivo, la proximidad, la interdependencia y la necesidad de contar con una visión compartida a largo plazo, algo esencial para movilizar los recursos necesarios para desarrollar la cooperación energética entre las dos orillas del Mediterráneo e impulsar la construcción de un mercado energético en la región.

Han existido diversas iniciativas en el ámbito de la cooperación euro-mediterránea de energía que no han generado resultados significativos. Por ello, los principales actores públicos y privados deberían multiplicar sus esfuerzos para cambiar esta tendencia, puesto que todos son conscientes de la dependencia mutua en materia de energía entre Europa y el Mediterráneo.

https://atalayar.com/blog/gas-del-mediterr%C3%A1neo-%C2%BFun-dividendo-o-un-desaf%C3%ADo

https://elcandelerotecnologico.com/2020/07/31/gas-mediterraneo-un-dividendo-o-un-desafio/

https://www.cronicaeconomica.com/gas-mediterraneo-un-dividendo-o-un-desafio-146086.htm