jueves, 30 de mayo de 2013

BRIC: ¿Lo sabía O'Neill?


En 2001, Jim O’Neill, de Goldman Sachs inventó el acrónimo BRIC: iniciales de Brasil, Rusia, India y China. Después se añadiría Sudáfrica. No sé si previó el terremoto que sacudiría la economía mundial y el cambio del centro de gravedad debido al agotamiento de las economías avanzadas y sus seguidas crisis. 

Los BRIC se reunieron en Durban (Sudafrica). Estudiaron coordinarse y crear su propio banco de desarrollo para pesar en la escena internacional, pero no lo consiguieron. Todavía no parecen una alternativa capaz de asumir un liderazgo político o económico en el mundo, y aunque la riqueza puede producir poder de mercado, no tiene porqué generar influencia geopolítica. Para muchos, el banco BRICS seria la afirmación del poder político, aunque primero tienen que superar sus diferencias y los obstaculos entre ellos que no son menores, como la sede y la asignación de capital. Hay tensiones entre Sudáfrica y china que representan los extremos del grupo.

La potencia número uno hoyes un país en expansión: China. Teniendo en cuenta que una de cada seis personas en el mundo es china, no es de extrañar que este gigante lidere los ránkings de consumo, producción y comercio.

Per aparte de China, encontramos una serie de países que se sitúan como serios candidatos a líderes en un futuro no muy lejano. como Brasil, India, Rusia, México o Indonesia, que están adelantando puestos en el ranking mundial de países más ricos (por PIB), dejando atrás a otros como Italia, España, Suecia, Noruega, Canadá y Holanda. Además, las divisiones BRIC no paralizan el grupo aunque limitan la efectividad. No hay indicios de cooperación militar y el comercio es sólo de 300.000 millones de dólares.

Pero si los BRIC tienen que ser algo, simplemente no tienen que hacer nada. Estos gigantes son capaces de criticar la gestión de la economía, como el fracaso de la ronda de Doha, pero sin ofrecer alternativas o romper el estancamiento. Y a pesar de que el grupo es incoherente, la marca ha calado y se han convertido en sinónimo de cambio y crecimiento.

Los BRIC no pueden reclamar coherencia jurídica, histórica o geográfica, en la forma que lo hace la UE. No se enfrentan a una amenaza de seguridad común. Pero los acontecimientos son una prueba de que nuevas combinaciones de las grandes potencias emergentes pueden desempeñar un papel en el escenario mundial. Los BRIC, como concluye el Sr.O'Neill, son un buen mecanismo para presionar a los países ricos a cambiar su papel en la gestión de la economía mundial mas radicalmente.

Expansión,  Edición Catalunya, Pag.2, Opinión, Martes 28 Mayo 2013

martes, 7 de mayo de 2013

¿Qué ofrece la banca Islámica?


Las entidades financieras que se basan en los preceptos musulmanes se abren paso en el mundo.

La crisis financiera de 2008 y la de la eurozona, junto con la indignación por los excesos de la banca convencional, están ofreciendo a los bancos alternativos una oportunidad para tener una mayor participación en el sistema financiero mundial. En un momento de incertidumbre crece el interés por el sector financiero islámico. Son cada vez más numerosas las entidades que intentan desarrollar productos e instrumentos adaptados a las reglas que rigen los preceptos de esa religión. Y aunque esas entidades representan solo una pequeña proporción a nivel mundial, muestran aspectos más saludables que muchas de sus homólogas convencionales.


La banca internacional empieza a apuntarse creando bancos, filiales o ventanillas islámicas en el Reino Unido, EEUU, Suiza, Alemania, Francia o Luxemburgo. En Londres destaca la apertura de seis bancos específicos, lo que ha convertido a la capital británica en la principal plataforma europea de la banca islámica gracias al esfuerzo de instituciones como la Bolsa de Valores de Londres (LSE). Francia, con París al frente, quiere establecerse como plaza principal. La importancia de este sector ha llevado al Dow Jones, al Financial Times y a Standard&Poor's a crear índices bursátiles especiales, de los que excluyen a aquellas empresas cuyas actividades no se adaptan a los principios del Islam. Grupos como ExxonMobil, Chevron, Nestlé, IBM, Microsoft, o Coca Cola, entre otras, han enfocado su estrategia para captar este tipo de fondos.

Esta novedad está demostrando una capacidad de movilizar recursos con una gama diversificada de productos de inversión y ahorro, que podrían beneficiar al sector público y privado y atraer importantes flujos de inversión en sectores productivos y financieros de todo el mundo. El fenómeno crecerá, pero habrá que liberalizar mercados, y asegurar la libertad de inversión y la coherencia jurídica para facilitar su incorporación al sistema financiero internacional. 

En 1974 el  Banco Islámico de Desarrollo, puso las bases de un sistema de ayuda basado en los principios islámicos. A finales del siglo XIX, el banco Barclays abrió una oficina en El Cairo. Actualmente, esta rama de las finanzas se desarrolla en 75 países y existen 350 entidades acogidas a dichos principios, de las cuales un tercio son bancos. El resto de la industria está compuesto por fondos mutuos, compañías de seguros (takaful), los “Sukuks” (emisiones de deuda) y la incipiente industria de los fondos de inversión (hedge-funds). Sus activos son hoy de 1 trillón de dólares, y se prevé que alcanzaran los 2.8 trillones. Tienen ingresados el 50% de los ahorros de la población musulmana del mundo, 1.200 millones de personas.

Las implicaciones islámicas crean un concepto diferente de las relaciones y actividades financieras y económicas. El vínculo acreedor-deudor se basa en un reparto equitativo de los riesgos entre el proveedor del capital y el emprendedor. Y de esto se deriva la prohibición de ingresar o percibir intereses.  Además, el dinero ha de estar vinculado a una actividad propia o para la comunidad. Así hay tres principales prohibiciones que el Islam impone en las finanzas: El cobro de interés, embarcarse en riesgos excesivos (gharar) y las apuestas.

Las finanzas islámicas predominaron en el mundo musulmán durante la edad media para impulsar el comercio. En España, el Mediterráneo y Báltico, los mercaderes islámicos eran los intermediarios y un engranaje indispensable en el mecanismo de las actividades comerciales. Se ha sostenido que muchos de los conceptos, técnicas e instrumentos de las finanzas islámicas fueron luego incorporados por los banqueros y empresarios de Europa.

El sistema financiero español debe dedicar esfuerzos a captar fondos de estos inversores - muy necesarios hoy-  y no quedar al margen. Hay que mirar esta realidad como una nueva oportunidad. Al fin y al cabo, este modelo no es tan diferente del modelo fundacional de las “Cajas de Ahorros” creadas en la segunda mitad del Siglo XVIII, que originariamente estaban vinculadas a instituciones de tipo religioso. Que nacieran con una finalidad social, significa, en este sentido, una gran coincidencia con este fenómeno. 

Por la naturaleza integrada de la economía mundial, un desastre en una zona tendrá consecuencias en otras áreas, por lejanas que sean. Es obvio que hay una crisis bancaria y de deuda, y un déficit de financiación y de liquidez. Este sistema alternativo podría formar parte de la solución. Pero para ello debe elegir un camino diferente, si quiere asumir esa función de ofrecer productos fiables y alcanzar un crecimiento sostenible. La cuestión es si las finanzas islámicas, más allá de los clichés, sabrán aprovechar esta oportunidad y cooperar para impulsar un crecimiento económico suficiente para un futuro próspero para todos.

El Periódico de Catalunya, Opinión Pag. 8, Viernes, 3 mayo 2013

viernes, 3 de mayo de 2013

No sólo petróleo

Dicen que Abu Dhabi ha optado por un modelo mezcla de Washington y Dallas en su empeño de diferenciarse. Si bien la marca de Dubai ha tapado el desarrollo vivido en Abu Dhabi y los cinco emiratos que forman Emiratos Árabes Unidos, lo que no cambia es que Abu Dhabi es la economía líder con el 61% del PIB del Estado.

El panorama económico mundial y regional ha cambiado, lo que obliga a retocar las prioridades, pero se mantiene intacta la estrategia a largo plazo para diversificar la dependencia del petróleo. Se establece en el corto plazo un nuevo plan para mantener las prioridades previstas en la Visión 2030,que se centra en ocho sectores claves: turismo cultural, aviación, industria, medios audiovisuales, salud, petroquímica, servicios financieros y energía renovable.

Para ello se pretende gastar 90.000 millones de dólares en cinco años. Ésto representa una clara señal de que el emirato da por finalizado el corto periodo de austeridad y una declaración de intenciones para volver a acelerar los proyectos. Este compromiso está siendo bien recbido por las empresas locales e internacionales y se refleja en los proyectos en marcha o anunciados, como los museos del Louvre y Guggenheim de Abu Dhabi, y el Saadiyat Island, la piedra angular de su apuesta por el turismo cultural.

Las relaciones con España se han intensificado con la compra de Cepsa por el IPC o la cooperación en plantas solares. La presencia de empresas españolas ha aumentado pero sin llegar a desarrollar el gran potencial esperado.

La influencia del Emirato a nivel mundial se va incrementando. Gran parte de los 627.000 millones de dólares de sus activos los gestiona el Abu Dhabi Investment Authority (ADIA). A ésto, hay que sumar los 65.300 millones de dólares de IPIC, y los 53.100 millones de Mubadala. Entre sus inversiones figuran Ferrari, Virgin Galactic, la Fórmula 1, Unicredit, Banco Santander Brasil y Air Berlin.

La fuerza de Abu Dhabi no sólo es su riqueza petrolera. El emirato ha adoptado un enfoque diferente comparado con Dubai y espera que el patrón a seguir le permita emerger como una referencia ganadora. Pero en el camino hacia el éxito serán necesarios el desarrollo de buenos planes y sus procesos de ejecución, la identificación de líderes locales, potenciar el rol del sector privado, la atracción de talentos y empresas internacionales.

Abu Dhabi puede estar desarrollando un nuevo tipo de economía que afectará a la inversión y la geopolítica, un modelo diferente a cualquier otro que lo ha precedido.

Expansión, Ed.Catalunya, Pag. 2 Opinión.  Jueves 2 mayo 2013